USB-C conector estándar

Tras el acuerdo provisional llevado a cabo el pasado mes de junio entre la Comisión Europea y los 27 países de los estados miembros de la UE para convertir al USB-C en el conector estándar en hasta 15 categorías de dispositivos electrónicos, el pasado martes 4 de octubre se ha dado el paso decisivo en el Parlamento Europeo para que la norma sobre el estándar USB-C sea de obligatorio cumplimiento a partir de otoño de 2024. La comisión da un paso importante contra los residuos electrónicos y las molestias que los consumidores experimentan debido a la prevalencia de diferencias e incompatibilidades entre los cargadores para dispositivos electrónicos. La Comisión presenta legislación a fin de establecer una solución común de carga para todos los dispositivos pertinentes.

¿A qué dispositivos electrónicos afecta?

Teléfonos móviles, las tabletas, las cámaras digitales, los cascos, los auriculares, las videoconsolas portátiles y los altavoces portátiles.  

¿Qué beneficios aportará una solución común de carga USB-C?

Los eurodiputados han alegado que la adopción de un modelo único de cargador reducirá la saturación y frustración de los consumidores, con soluciones de carga incompatibles y la montaña de cargadores obsoletos descartados cada año y reducirá los costos para los consumidores. También destacar que USB-C puede funcionar como cable para transferir datos y energí­a, pero tenemos que añadir otro uso. Y es que el nuevo USB Tipo C está perfectamente equipado para transmitir señales de audio y ví­deo, lo que significa que los dispositivos podrí­an prescindir del clásico puerto HDMI. Se trata de una tecnologí­a que puede unificar todos estos usos y facilitar, por tanto, la experiencia del usuario. La comisión ha propuesto:

• Un puerto de carga armonizado para los dispositivos electrónicos: el USB-C será el puerto común
• La armonización de la tecnología de carga rápida. Contribuirá a garantizar que la velocidad de carga sea la misma cuando se utilice un cargador compatible para un dispositivo.
• La venta por separado de los cargadores y los dispositivos electrónicos.  Con ello se limitará el número de cargadores no deseados. Se calcula que la cantidad de residuos electrónicos disminuirá en casi mil toneladas anuales.
• Una mejora de la información dirigida a los consumidores: los fabricantes tendrán que facilitar información sobre el rendimiento de carga, potencia requerida por el dispositivo y si admite carga rápida. Esto facilitará el comprobar si los cargadores que ya tienen los usuarios cumplen los requisitos de su nuevo dispositivo o les ayudará a seleccionar un cargador compatible.

El conector USB-C ofrece:

• Versatilidad: puede usarse de forma reversible, esto significa que podrás insertarlo más rápido al no tener que dar mil vueltas para acertar con el lado correcto.
• Rapidez:  La velocidad de transferencia también aumenta, estamos hablando de hasta 10 Gbps, y será capaz de cargar más del doble de rápido, llegando hasta los 240 vatios.
• Transversalidad: Te hemos indicado que el el conector de Tipo C es compatible con la transferencia de datos, de energí­a y de audio y ví­deo.

 

¿Qué ocurrirá con los cargadores antiguos?

En el caso de los cargadores que ya cumplan los nuevos requisitos de interoperabilidad, naturalmente, los usuarios podrán reutilizarlos. En el caso de los cargadores que no sean interoperables, deberán eliminarse y reciclarse cuando se sustituyan los dispositivos correspondientes. Los usuarios dispondrán del tiempo suficiente para adaptarse gracias al período de transición previsto antes de la entrada en vigor de los nuevos requisitos.